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Métodos de conservación de alimentos

Ya desde la antigüedad, los humanos intentamos conservar los alimentos durante el mayor tiempo posible. Por ello, hemos diseñado estrategias que eviten el rápido deterioro de los alimentos, algo que era especialmente importante en las épocas de escasez.

Los microorganismos son la principal causa de la corta vida de anaquel de los productos, por ello la importancia de las Buenas Prácticas de Manufactura (BPM), diseño de envase y un muy buen proceso de conservación y aditivos adecuados (en caso de requerirse).

A continuación te presentamos los 5 principales métodos de conservación de alimentos.

·      REFRIGERACIÓN

Los microorganismos es la principal causa de la corta vida de anaquel de los productos, por ello la importancia de las Buenas Prácticas de Manufactura (BPM), diseño de envase y un muy buen proceso de conservación y aditivos adecuados (en caso de requerirse).

 

·       CONGELACIÓN

La temperatura debe ser inferior a 0 ºC, y se procura que se mantenga a -18 ºC. Con la congelación se consigue que el agua del alimento se convierta en hielo, por lo que las bacterias, al no disponer de agua líquida, prácticamente no pueden proliferar. No las matamos, pero crecen extremadamente despacio.

 

·       PASTEURIZACIÓN

Se aplican temperaturas más bajas (de unos 80 ºC), por lo que sí que mantenemos las propiedades del alimento. El problema es que matamos a las bacterias pero no las esporas, por lo que los productos pasteurizados (como la leche) deben conservarse en el refrigerador una vez abiertas para ralentizar el desarrollo de estas bacterias.

 

·       DESHIDRATACIÓN

Método de conservación que puede realizarse mediante distintas técnicas siempre que se consiga la pérdida de agua del alimento. Existen deshidratadores, unas máquinas que retiran el agua de los productos para aumentar su vida útil.

 

·       ESCABECHADO

Consiste en aplicar al alimento un baño de sal y vinagre, lo que permite una buena conservación (la sal deshidrata y el vinagre acidifica) y, además, le da al producto un sabor característico.